Los entes de control ya iniciaron sus procesos de hacer cumplir con la veda y las tallas mínimas y según han informado, estos operativos se seguiran llevando a cabo, mas aún despues del gran decomiso de pescado de contrabando que venia del país vecino de Venezuela.
Una labor que ayuda a proteger el mercado nacional de la incursión de producto subsidiado o sin los controles de calidad establecidos, y que contribuye a evitar la sobrepesca, en especial de las especies que estan en alto riesgo, como lo son las diferentes variedades de bagres.
Loable el uso que se le dio a este pescado, pues es bien sabido que los ancianatos, en muchas ocasiones tienen dificultades para obtener este tipo de alimentos, y que resultan importantes para la nutrición de estos adultos mayores.
Donan pescado a ancianatos
Unos 100 abuelos de distintas fundaciones, ONG y hogares geriátricos tendrán una porción de pescado.
Por una paradoja de la vida, unos 100 abuelos de distintas fundaciones, ONG’s y hogares geriátricos tendrán desde hoy una buena porción de pescado en sus almuerzos.El favor ocurrió porque la veda a la pesca, transporte y comercialización de productos pesqueros en la Orinoquia, hizo que la Policía Fiscal y Aduanera (Polfa) instalara retenes de control y en uno de ellos cayó un camión procedente de Arauca con una tonelada de bagre rayado, mapurito, cachama, bocachico, dorado etc.
Ricardo López Briceño, biólogo de la Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca (AUNAP), dijo que en la veda todo producto que sea decomisado, de acuerdo a la ley, debe ser donado a centros de beneficencia o ancianatos y albergues infantiles que cumplan con las normas.
“El decomiso lo entregamos a unas 30 fundaciones de Villavicencio que tienen que ver con la asistencia a los adultos mayores. En promedio se les entregó a cada una de esas fundaciones unos 32 kilos para que se los repartieran a los abuelos”, afirmó López.
REDACCIÓN LLANO SIETE DÍAS
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